El papel higiénico es uno de los productos básicos en hogares, locales comerciales y, en definitiva, cualquier lugar que cuente con un baño.
Es de resaltar la.kmportancia de este producto que, en tiempos la Pandemia, fue uno de los primeros artículos que se agotaron en los supermercados, cuando las personas comenzaron a hacer acopio de productos por miedo a una crisis de abastecimiento.
Pero, aunque el papel higiénico parece algo imprescindible en nuestras vidas: Hacernos a la idea de que puede desaparecer más tarde que pronto. De un tiempo a esta parte, son muchas las voces que señalan el perjuicio medioambiental que supone el uso masivo de papel higiénico y que piden sustituirlo por técnicas más ecológicas como la vuelta al bidé, o la manguera que muchos países ya han incorporado junto al lavabo.
Riesgos para la salud de usar papel higiénico
Existen grupos de personas que denuncian, que no es saludable para el uso humano: para muchos, es una forma ineficaz de limpiarnos tras usar el baño, además de un potencial foco de infecciones. Rose George, autora de The Big Necessity: The Unmentionable World of Human Waste and Why It Matters dijo literalmente que no entendía cómo «millones de personas andan por ahí con los anos sucios mientras creen que están limpios».
Además de la cuestión de la limpieza, que muchos critican al uso del papel higiénico, hay otro factor: la salud. El papel higiénico puede producir desde fisuras anales hasta infecciones de la uretra, pasando por hemorroides.
Por eso, cada vez son más las personas que entre el papel higiénico y otros métodos para limpiarse después de hacer sus necesidades, eligen la segunda opción.