Maestros Cafetaleros, presentaron carbón de coco, como producto innovador, luego de la formación que recibieron de un diplomado ofrecido por las autoridades nacionales e instituciones gubernamentales del Táchira, para fortalecer los conocimientos sobre el cultivo de café en el Estado.
Unos 150 cultivadores e interesados en este rubro, de data colonial del Táchira, y que formó parte de la fuerte economía de la época, junto al cacao y el algodón.
El coco es la fruta por tradición para hacer las famosas cocadas, su origen, data de España, se cree que se popularizó en Medina del Campo, Valladolid; gracias a un cocinero local que venía de Zamora, dentro de la misma comunidad de Castilla y León, quien preparaba este dulce con piñones. Después de la Guerra Civil Española, la escasez de esta semilla hizo que comenzará a usar coco rallado, así surgió la cocada. En México las responsables de este manjar son las monjas, quienes lo mezclaban con canela para darle un sabor diferente.
En el país las cocadas se comenzaron a elaborar con yema de huevo, lo cual les daba ese característico color amarillo. También existen diferentes variedades de cocadas: suaves (sin hornear), con coco fresco, firmes con coco maduro, y las que se hornean con huevo y tienen una textura más rústica.
En Venezuela y en la región andina, ya no solo se utilizará el coco en la elaboración de las ricas cocadas, sino que este campeón permitirá seguir dando gustos al paladar, con el uso del carbón de coco, tendremos parrilladas ecológicas, con sabores auténticos, gracias a la pureza del carbón de coco, y en especial, un café puro en aroma y sabor.
Es así que, en Táchira, en adelante, no se perderá nada del rico coco, ahora, Luís Ortiz y su equipo de maestros Cafetaleros, trabajarán la corteza del coco, es decir, la cáscara, para hacer carbón, y de esta manera ofrecer bioenergía, que podrá utilizarse, tanto para uso doméstico, como industrial.
Destacó el experto en café, que el uso de este carbón de coco, puede ser un ingrediente especial en el procesamiento del tostado del café y, que permitirá garantizar un sabor más puro-. Esta declaración del maestro, instó a InfoRéplica+ a conocer un poco sobre este biocombustible, y encontramos, que, el carbón de coco es completamente neutro en sabor y olor, por lo que es perfecto para su uso en barbacoas y el tostado del, p. ej., en un vecindario con poco espacio. El carbón de coco ecológico quema con una formación de ceniza de máximo el 4 %, prácticamente sin dejar residuos y se caracteriza por una baja formación de humo.
Además, que el carbón natural elaborado a partir de la cáscara de coco es el producto perfecto para aquellos que buscan una alternativa de calidad, respetuosa con el medio ambiente y potente al carbón de madera.
Esta es una forma de rescatar saberes ancestrales de la cultura afro, que hacía carbón con restos de maderas para venderlo o preparar sus alimentos, como ocurría en La Barraca, antiguo puerto fluvial de Esmeraldas.
Desde InfoReplica+ les contamos, que con ese carbón se intentan reducir el impacto de la contaminación ambiental, como ocurre con la obtención del carbón de leña.
A partir de la concha de coco es mejor. Empieza a recolectar las conchas en los sitios donde se elabora cocadas. La concha se muele, se quema y se compacta con un poco de resina orgánica en pequeños moldes, se deja secar por cinco días y está lista para su uso. Una de las ventajas es que el olor no se adhiere a la piel, ropa y cabello. Las brasas tienen una duración de una hora más que el carbón del que normalmente se usa en los asaderos, según los estudiantes. Para la producción a gran escala, los alumnos han logrado identificar los sitios donde más se produce y se utiliza el coco.